Tuesday, April 14, 2009

¡Recuperación a la vista!

 

Durante los últimos días hemos comenzado a percibir signos alentadores de la incipiente recuperación en la economía norteamericana:

1. Un incremento en la adquisición de bienes raíces

2. Un consumo en los EE.UU. sorprendentemente saludable

3. Números positivos (es decir, mayores a cero, ¡lo que ya es una ganancia en la coyuntura!) en las ganancias trimestrales de compañías financieras, notablemente Goldman Sachs.

4. Un discurso incrementalmente optimista de las autoridades económicas.

Todas estas son consecuencias de hechos económicos concretos: El anuncio por parte del Tesoro Norteamericano del TAP, y un manejo sorpresivo de la política monetaria por parte de la FED.

No me cabe duda que la recuperación viene en camino. Sin embargo, como todo buen economista (Recuérdese que la economía es la “ciencia maldita”) no dejo de preocuparme:

1. El incremento de la venta de casas en los EE.UU. ha sido mayoritariamente en el mercado de los Foreclosures. Todo alumno de economía básica sabe que una reducción en el precio genera un incremento de la demanda. Esta demanda no tiene porque, necesariamente, estar ligada a una mejora estructural de los mercados de activos inmobiliarios.

2. Las cifras de consumo en los Estados Unidos concuerdan sorprendentemente con el timing en que el servicio de impuestos internos ha emitido los retornos de impuestos más alto de los últimos años.

3. Como correspondencia a los buenos números que demuestran ciertas compañías en el sector financiero, empresas del sector real de la economía se encuentran en dificultades. En el sector automotriz baste citar el riesgo de insolvencia para General Motors y Chrysler.

4. Bernanke se encuentra indudablemente orgulloso de su propio manejo monetario. Durante la actual coyuntura ha encontrado razones poderosas para argumentar a favor de un incremento en su hoja de balance. Además, ha llevado a la práctica una política de recompra de papeles gubernamentales de largo plazo. En otras palabras, ha monetizado deuda gubernamental. ¿Aun suena confuso? Esto deberá dejarlo claro: ha apretado el interruptor de la imprenta, ¡Se ha puesto a imprimir dólares!

Desde un punto de vista a más largo plazo, mi preocupación se encuentra más relacionada con la capacidad que demuestren las autoridades económicas para retroceder sus políticas expansivas. Como cualquier familia sabe, es más fácil gastar más, que posteriormente reducir el nivel de vida al que uno ya se acostumbró. En el futuro, la política fiscal norteamericana deberá enfocarse a reducir el tremendo nivel de deuda que a mediano y largo plazo ha contraído. Por otra parte, la política monetaria deberá así mismo reducir sus excesos: deberá retirar de manera ordenada la liquidez excesiva que ha inyectado al mercado. Ambas tareas probarán ser extremadamente difíciles de implementar.

0 comments:

About This Blog

  © Carlos Raul Pitta Arcos Actualizado en Abril de 2009

Back to TOP